Un robot con sentimientos, ese es Wall-E, pero en un principio él no conocía lo que era esa palabra, sus años de experiencia en la recolección de basura lo han llevado alrededor de todo el planeta experimentando estas sensaciones que para él son totalmente nuevas, pero hay una que últimamente ha rondado más por sus circuitos, la tristeza, provocada por la soledad que ha sido su única compañera todo este tiempo.

Cuando una visitante inesperada del espacio llega, el pequeño autómata decide emprender una aventura para ir en búsqueda de esa compañía que tanta falta le ha hecho, y por que no, quizá conocer ese sentimiento tan extraño al que le llaman amor.